lunes, 19 de mayo de 2008

Puente en Alquézar y Sierra de Guara

Este año he podido disfrutar del puente de San Isidro de una forma diferente, haciendo turismo activo en la Sierra de Guara con algunos amigos.

La Sierra de Guara era un lugar desconocido para mi hace unos pocos días. Ahora, es un lugar al que espero volver pronto. Se encuentra en Huesca, antes de llegar a los Pirineos. La Sierra se caracterizá por los cañones y barrancos que se han formado por la erosión producida por el agua, creando muchas veces formaciones espectaculares, cuevas, simas,... y esa fué la excusa perfecta para ir allí: Hacer descensos de barrancos.

Nos alojamos en Alquézar, un pueblo pequeño pero bien conservado cercano a la sierra de Guara.

Vista de Alquézar

El primer día que estuvimos allí, aprovechamos para hacer el descenso de un cañon seco. El escogido fue el Basender, cercano a la localidad de Lecina.

Acceso al cañon de Basender


Llegar al comienzo del cañon no fue dificil. Peo pronto llegó el primer rápel que había que superar, y el primer rápel que hacía en casi 10 años.

Barranco de Basender

5 rápeles más hubo que hacer, pero poder difrutar del entorno del barranco mereció la pena.


Otra foto del Basender

Como anecdota de la jornada, al finalizar el barranco, nos tocó cruzar dos veces el río Vero para poder volver al aparcamiento. Así que aunque el barranco era seco, nos tocó mojarnos finalmente bastante los pies

El viernes nos llovió por la mañana, pero por la tarde pudimos aprovechar para hacer una pequeña ruta en Alquezar, la pasarela del río Vero.


Camino hacia las pasarelas del río Vero

En el camino había mucha agua de las últimas lluvias. A veces el camino estaba inundado, y finalmente llegamos a un punto donde fue imposible seguir adelante. Pero la ruta fue agradable.

Pasarela del río Vero

Arriba se ve una pasarela de la ruta, por encima del río Vero.

El sabádo fue el día escogido para hacer el barranco con agua. Hicimos el barranco del Lumus, donde pasamos por algunas grietas muy estrechas.



Rápel del barranco de Lumus

El barranco fue divertido y tuvo de todo: rápeles, tirolinas, toboganes, pequeños saltos a pozas, andar por grietas..

En el barranco del Lumus

Estuvimos unas 4 horas para realizar el barranco, más otra media hora larga para volver al aparcamiento.

Finalmente, el domingo aprovechamos la mañana para escalar un poco en Alquézar, aunque yo no lo probé, me quedé abajo que no me tenía que lesionar para poder conducir luego :p

Sin embargo, aquí hay alguna fotillo:

Escalando en Alquézar



En conclusión, un forma de pasar un puente de forma activa en un lugar que no conocía.